Las investigaciones no han cesado sobre el caso del diputado de Voluntad Popular (VP) y presidente de la Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional (AN), Freddy Superlano, quien junto a su primo Carlos Salinas, fallecido en el suceso, fueron drogados con escopolamina y robados, el pasado 22 de febrero, tras el concierto Aid Live, organizado como parte de la agenda de la entrega de ayuda humanitaria a Venezuela a través de la frontera colombo-venezolana.
La Policía de Cúcuta aún sostiene, contrario a lo que declaró Superlano al recuperar su salud, que fueron dos mujeres las que cometieron el delito tras acompañarlo a él y al su primo y asistente, Carlos Salinas, a una noche de diversión y tragos que continuó la mañana siguiente en un motel de Villa del Rosario, en la Autopista Internacional que comunica a la capital de Norte Santander con San Antonio, Venezuela, donde se supone que los drogaron, causándole la muerte a Salinas más tarde, en el hospital Jorge Cristo Sahium.
El coronel Javier Barrera, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, en declaraciones a la prensa colombiana señaló oportunamente que a través de cámaras de seguridad de los sitios donde previamente estuvieron las víctimas y las supuestas victimarias, se trata de identificar a las mujeres.
Incluso, aunque el jefe policial no lo mencionó, se especula que podrían ser venezolanas que trabajan o trabajaban como scort o damas de compañía en una conocida zona de Cúcuta.
En relación a lo que conocen hasta el momento de las horas que antecedieron el crimen, Barrera informó que “el diputado y su asistente asistieron el viernes 22 de febrero al concierto que se desarrolló en el puente de La Unidad, salen del concierto, van a un establecimiento, un restaurante a cenar y de allí se trasladan a una zona donde quedan ubicadas unas discotecas. Parece que ahí conocieron a estas dos mujeres con las que departieron hasta altas horas de la madrugada, y posteriormente ingresan los cuatro a un motel ubicado muy cerca al municipio Villa del Rosario”.
Tres días después del hecho, Superlano acudió a fiscalía colombiana y formuló una denuncia en la que pidió que se esclarezca la muerte de su primo. (MB)