Las colas de peregrinos volvieron hoy al Edículo que protege la tumba de Jesucristo, tras la reapertura de las puertas del Santo Sepulcro de Jerusalén, cerradas excepcionalmente durante tres días como protesta a la políticas fiscales y legislativas israelíes.
El musulmán palestino Wayid Nuseibeh, encargado de abrir y cerrar la Iglesia, volvió a su puesto y recibió poco después de las 4.00 (2.00 GMT) una escalera del interior a través de un ventanuco, y las llaves de acceso que la familia del también musulmán Adeeb Yawad custodian desde 1187. EFE